2ª Sesión: Trabajar el ritmo (7/10/2010)

Ejercicio por parejas. Uno de la pareja permanece tumbado bocarriba con piernas y brazos extendidos, el otro de la pareja pone sus manos en su tripa y en su pecho para sentir su respiración. Se realiza lo mismo bocabajo poniendo las manos en la espalda, seguidamente el compañera se tumbará encima y entre los dos intentarán respirar simultáneamente. Me ha parecido un bueno ejercicio que mejora la confianza entre nosotros. Cuando mi compañera y yo hemos logrado respirar a la vez me he notado mucho más relajada y tranquila.

Ejercicio entre todo el grupo. La mitad del grupo se encuentran con los ojos cerrados y los demás tienen que realizar una secuencia de ritmo en alguna parte de su cuerpo. Después, los que han realizado el ritmo se separan por la sala y hacen sonar el mismo ritmo. El compañero que continúa con los ojos cerrados debe identificar el sonido y situarse cerca de él. He visto que en algunos casos ha sido difícil encontrar al compañero con los ojos cerrados y solo oyendo un sonido, porque si los sonidos eran parecidos o se encontraban muy cerca es complicado identificarlo.

En grupos de 3 o 4. Hacer un ritmo con alguna parte del cuerpo de 8 tiempos. Primero cada persona del grupo haría el ritmo por separado, después todos en canon y por último todos a la vez.

En el caso de mi grupo tuvimos que elegir un ritmo fácil para no perdernos en el canon, si los tiempos del ritmo son muy rápidos es difícil que comience el siguiente compañero. Este ejercicio ayuda a agudizar el oído.

Todo el grupo en círculo, utilizando una música, cada uno tiene que hacer el movimiento que a él le sugiera esa música, los demás compañeros debemos seguirle. Cuando otro compañero quiera hacer otro movimiento lo puede hacer, no hay tiempos. Después, haremos el mismo ejercicio pero en movimiento. Me han sorprendido las maneras tan diferentes que hay de interpretar la música, a cada compañero le ha sugerido diferentes cosas la música. Esto te hace aprender que la música y sus interpretaciones dependen de la persona que la escuche y no de la música en sí.

En grupos de 3 y 4. Debemos realizar 16 movimientos para 16 tiempos. Lo tenemos que hacer, primero a tiempo, después a 2 tiempos cada movimiento y seguidamente a 4 tiempos. Tras afianzar estos pasos, cada persona del grupo tiene que hacer uno de los movimientos diferente o igual, a diferente tiempo.

Por alguna razón, en el caso de mi grupo haciéndolo con la música y solas nos ha salido bien todas las repeticiones, pero cuando hemos enseñado el ejercicio a los demás compañeros, hemos perdido el ritmo e íbamos a destiempo. Creo que ha podido ser porque en algún momento hemos dejado de contar los tiempos en nuestra cabeza ya que teníamos más distracción. Este ejercicio me parece muy útil para ver las velocidades que puede tener un movimiento y como cambia según en el tiempo que lo hagas.

Celia.