jueves, 25 de noviembre de 2010

7ª SESION: VIEW POINTS II

Seguimos con nuestro curso de interpretación en el que ejercitamos los distintos puntos de vista escénicos. Continuamos con ejercicios similares a los de la clase anterior, pero añadiendo cada vez más dificultades y haciendo cada vez más énfasis sobre la escucha interna y grupal, y sobre puntos como el tiempo, el tempo, la repetición, el ritmo, el impulso, el movimiento y, sobre todo, el espacio, ya que comenzamos a hacer más uso del mismo.
Comenzamos la sesión haciendo un círculo perfecto entre todos los compañeros. Es importante empezar con una buena escucha grupal. Para ello hacemos un ejercicio de ritmo con un balón: Se lanza el balón hacia el centro del circulo, y siguiendo un impulso, alguien debe salir al centro a recibirlo para devolverlo, con el mismo ritmo, al compañero de al lado, en sentido de las agujas del reloj. Para evitar “impulsos simultáneos”, nos vamos enumerando en el momento en que decidamos a salir. Esto lo hacemos para aprender a salir a la escena sin miedos. Si nos decidimos a coger el balón, vamos a por él, o de lo contrario se escapa, aunque siempre con el cuidado de tener en cuenta al resto de los compañeros.
Seguidamente, y para comprobar la importancia de la atención, hacemos un ejercicio de palmadas. Simplemente consiste en alterar los números en nuestra mente. Lo que oímos, no es lo que repetimos. Esto es, desplazándonos por el espacio, el profesor da una palmada, y nosotros, al unísono, damos dos, y a la inversa. Si este da tres palmadas nosotros no damos ninguna y si da cuatro, respondemos con tres. Es, aparentemente, un sencillo ejercicio que nos demostró lo fácil que es perder la atención, cuando es importantísimo mantenerla en todo momento a la hora de estar en escena.
Una vez que hemos repasado estas sencillas e importantes cuestiones pasamos a otro ejercicio de escucha grupal e impulsos. Esta vez se trata de desplazamientos por el espacio: Partiendo todo el grupo desde un extremo del “espacio escénico”, uno de nosotros se decide a iniciar un determinado movimiento, siempre el mismo movimiento, de la misma forma y con el mismo ritmo. Todos los compañeros, ante la propuesta, se desplazan de la misma manera. Repetimos esto al llegar a cada extremo, siempre atentos a la persona que propone ese impulso kinestésico.
En el siguiente ejercicio se trata también de proponer un movimiento original, pero esta vez caminamos de uno en uno, de forma que cada compañero exagera la forma gestual un poco más a la anterior. Es interesante observar como en grupo se consigue, pasar de una simple forma de andar cabizbajo a parecer una persona realmente depresiva y triste o por el contrario contenta si se tratase de un gesto opuesto.
A continuación realizamos lo mismo pero pegados los unos a los otros, como si se tratase de una pelota humana, nos desplazamos por todo el espacio, y en cada cambio de dirección, una de las personas del “montón” que enfrenta ese sentido propone su movimiento personal para que el resto le escuche e imite.
Recordando los ejercicios de la clase anterior, volvemos a hacer grupos de 5 personas que se disponen una al lado de la otra. Como si de un telón se tratase, se nos avisa de que estemos prevenidos y, al sonido de la música, comienza nuestra puesta en escena… Con la posibilidad de incorporar algunos nuevos movimientos, tales como el de tumbarse boca arriba o abajo y orientación en cualquier sentido, comenzamos nuestra escenificación. Resulta impresionante observar como, a partir de elementos tan sencillos se aprecia una pronunciada coordinación y escucha entre compañeros, a la vez que impulsos y acciones inesperadas, y por tanto sorprendentes para el observador. El resultado de las composiciones es cada vez mejor.
Ni que decir tiene el siguiente y último ejercicio. Una composición de movimientos, en el que se ha incorporado también, aunque de forma sencilla (solo adelante y atrás), desplazamientos por el medio.
Tras algunas repeticiones de estos ejercicios se empieza a notar la capacidad de creatividad y escucha que hemos aprendido. Ya no nos movemos como robots arriba y abajo. Esta vez existió la mirada entre los compañeros, la intuición, escucha y por tanto una buena compenetración. Y cuando esta se alcanza, se pasa a la repetición para que el público la disfrute un poco más. Cada uno pone su grano o montaña de arena, bien sea porque lo pide la música, el propio cuerpo o la situación de los compañeros. Combinando la creatividad con todos estos puntos, poco a poco vamos observando el reflejo de una buena composición escénica.

Sandra Jiménez Parylak

martes, 16 de noviembre de 2010

6ª SESIÓN: VIEW POINT I

En primer lugar la sesión ha comenzado con un círculo en el que teníamos que dirigir la mirada hacia alguien y a continuación decir su nombre en voz alta. Después realizamos el mismo ejercicio pero con una pelota diciendo el nombre del compañero y pasándosela después. Tras este ejercicio pasamos la pelota diciendo el nombre del que nos la ha pasado y posteriormente el nombre del que se la pasó al que nos la pasa, es decir hace dos compañeros.
A continuación nos desplazamos por el espacio, cada uno por donde quiera, primero con pasos mas lentos, luego más rápido. De nuevo con la pelota la pasamos entre nosotros sin decir nada pero sin que se caiga en ningún momento. Siguiendo con la pelota, realizamos 10 pases, del 1 al 10, y del 10 al 1. Después sustituimos uno de los números por la primera palabra que se nos venga a la cabeza, por ejemplo el 6 por aire, de manera que al llegar al pase 6 se dirá “aire” en vez de 6.
Seguimos en el espacio esta vez cuando alguien decida pararse los demás deben pararse también, de manera que quede lo más sincronizado posible. Posteriormente además de pararse también nos podemos poner en cuclillas o tumbarnos. Los demás deben imitar lo que decida hacer cada cual en un determinado momento.
Después, estando quietos en el espacio, cuando Darío da una palmada deben moverse 6 personas y pararse. Después con la siguiente palmada, 5 personas y así sucesivamente. De esta manera aprendemos a coordinarnos y a ver lo que ocurre a nuestro alrededor para reaccionar o rectificar.
A continuación dividimos la clase en dos grupos. El primer grupo se pone en fila unos al lado de otros y con música, cuando uno decida bajar los demás deben bajar también evitando mirar a los lados. Aquí se observa como los que están en los extremos tardan más en darse cuenta si el otro extremo se pone en cuclillas.
Mismo ejercicio pero solo debe haber dos en cuclillas mientras que los otros están de pie. Aquí observamos como son capaces de percibir bien por el ruido o por el movimiento las acciones que realizan nuestros compañeros y de esta manera poder coordinarnos.
Después de haber realizado esto los dos grupos, nos ponemos en fila uno detrás de otro, cambiando componentes en los grupos y realizamos el mismo ejercicio para que solo haya dos en cuclillas.
Volvemos a la fila uno al lado de otro, esta vez alternando saltos, cuclillas y estar quieto. Con la música hemos sido capaces de crear una composición intentando seguir el ritmo y sincronizándonos con los compañeros.

Marta Robledo

domingo, 14 de noviembre de 2010

5ª SESIÓN: TENSIÓN - RELAJACIÓN

La sesión del jueves 28 de octubre fue muy interesante porque hicimos actividades muy variadas tanto por parejas y grupos como individuales.
Empezamos haciendo un ejercicio por parejas que consistía en la tensión y relajación de los músculos de todo el cuerpo. Una se tumbaba en el suelo y se relajaba, y la otra la movía e intentaba darla la vuelta descubriendo las posibles formas de movimiento, el peso de un cuerpo relajado… Luego se cambiaba la relajación por la tensión de todo el cuerpo con lo que la facilidad de mover a la compañera disminuía notablemente por la fuerza que ésta ejercía. Una vez hecho esto varias veces, se cambiaban los papeles, la que había movido a su compañera se tumbaba y el ejercicio se repetía.
Con esta actividad conseguimos una gran relajación además de sentir, por una parte, las posibilidades de movimiento del cuerpo de tu compañera y por otra, las diferentes sensaciones al mover tu cuerpo cuando estás relajado o tenso.
La siguiente actividad consistió en separarnos por el espacio con los ojos cerrados e intentar ubicarnos y orientarnos hacia otros lugares de la sala, y a la vez, intentar reconocer a los compañeros que ibas encontrando. Luego volvíamos a nuestro sitio inicial según donde pensábamos que habíamos estado en el inicio sin haber abierto los ojos.
Con este ejercicio nos dimos cuenta de la orientación que podemos tener sin ver lo que hay a nuestro alrededor, si no por sonidos, distintas luces…
Tras este ejercicio nos colocamos por parejas y cada una representaba sin ningún objeto, una acción diferente (soplar, jugar a la pelota, tocar, contacto…). Repetimos el ejercicio cambiando de acción y esta vez en grupos de tres, lo que hizo que fuera más interesante porque había más opciones y posibilidades que probar. Después de esto, delimitamos el espacio con pañuelos, con una mesa… e individualmente hicimos una de las acciones anteriores. Luego lo repetimos pero por parejas.
Para finalizar la sesión, hicimos dos grupos y creamos una composición mezclando todos los aspectos trabajados ese día. Así pudimos observar las ideas, la representación, la coordinación…de nuestros compañeros y de nosotros mismos.

Ángela

lunes, 1 de noviembre de 2010

4ª SESIÓN: EL MOVIMIENTO A TRAVES DE LAS EMOCIONES

1º. Comenzamos a andar por la sala, pero nos vamos imaginando diferentes cosas:
- Por la arena de playa.
- Por la arena de la playa quemando.
- Por la playa pero con los pies metidos en el agua hasta el tobillo.
- Por el agua, con el agua hasta las rodillas.
- Por el agua, con el agua en las caderas.
- Por el agua, con el agua por el cuello.
- Salimos del agua y nos metemos en arenas movedizas.
- Arenas movedizas hasta las rodillas.
- Arenas movedizas hasta la cadera.
- Arenas movedizas hasta el cuello.
- Salimos como podemos de las arenas movedizas.
- Nos deslizamos por el hielo.

2º. Andamos por la sala, y cuando pasamos por el medio de la sala, reaccionamos expresando:
Alegría. Tristeza. Locura. Entusiasmo. Timidez. Descaro. Miedo.

3º. Con música, comenzamos a andar por la sala, y cuando se apaga la música, nos dirigimos hacia una de las multitudinarias sillas que se encuentran por la sala, cada una tiene una tarjeta con un tipo de sensación emociones o sentimiento (alegría, tristeza, entusiasmo, rabia, timidez, locura, miedo o descaro). Durante el tiempo que la música no suena, tenemos que dirigir el sentimiento que pone en esa tarjeta hacia la silla. Al comenzar la música de nuevo volveremos a desplazarnos, y así sucesivamente.

4º. Las tarjetas anteriores se multiplican por dos, una que se queda en la silla y otra que nos llevamos con nosotros. En este caso nos desplazamos por la sala hacia una silla, interpretando el sentimiento que existe en la tarjeta que llevamos con nosotros. Cuando llegamos a otra silla, cambiamos la tarjeta por la de la silla e interpretamos la nueva emoción o sentimiento. Lo repetimos varias veces.

5º. Mismo ejercicio que el anterior, pero esta vez con público.

6º. Por parejas con público. Cada uno de la pareja, tiene una emoción (la que le haya tocado en su tarjeta), pero uno de la pareja le transmite su emoción al otro, y al final acaban los dos sintiendo lo mismo.

7º. Nos dividimos en dos grupos, y cada grupo realiza una secuencia de movimientos de 4X8, pero sin introducción de sentimientos o emociones.
- Interpretamos esa secuencia de movimientos, pero cada uno expresando la emoción que le ha tocado en su tarjeta.
- Interpretamos una secuencia de movimientos por parejas, en la que se comienza por un sentimiento o emoción y se finaliza con otro.

8º. Relacionamos la música que suena con las emociones de las tarjetas.

Miguel Angel Castillo